Festival nòmada a Assa

No importa la infelicidad,  el error la muerte y la derrota. No importa que a menudo nos veamos atrapados en una broma de mal gusto diseñada por el azar o por o por un relojero cósmico desprovisto de sentimientos.  A cada instante se pone a cero el contador, y el ser humano tiene un don maravilloso; la oportunidad de empezar, de intentarlo de nuevo.

Anónimo.

Es posible que haya algo de verdad en eso que dicen que nuestro destino está escrito, que nosotros simplemente lo vamos haciendo realidad y este viaje esta siendo una realización de todo lo mejor que esperaba,  no porque soñase en cosas concretas sino en aullentar los miedos y abrir la puerta a la felicidad. Ha sido una suerte que hoy  fuese a para a Sudi Ifni y conociese a José, un marroquí con pasaporte español pues nació el año 1968 cuando esta parte de Marruecos era español, me ha ayudado a encontrar a alguien  para reparar el pinchazo de la rueda de la silla y me ha hablado de un lugar llamado Zag, según el allí es la auténtica puerta del desierto pero la real, sin turistas, no puedo negar que uno de mis objetivos del viaje era conocer a los saharauis de verdad y sus palabras me han motivado lo suficiente como para hacer más de 100 kilómetros por carretera y llegar a Assa un pueblo con sabor a aventura total pues yo creo que todos los Land Robert viejos que quedan están aquí, dios mío un montón de gente del lugar, con turbantes saharauis sobrecargados con pacas de paja , bidones y múltiples paquetes.

 Camino de Zag por puro desierto he adelantado a media docena de ellos y en un cruce he visto un cartel con nómadas en camello dibujados, y varias banderas de Marruecos ondeando en sendos mástiles en  la carretera que sale del desvío y que no aparece en mis mapas, yo continuo recto hacia Zag y empiezo a subir un pequeño puerto desde donde se ve el desvío y me paro a ver el paisaje y veo que todos los coches se desvían en ese desvío y como en la carretera hay más coches, y sin pensarlo dos veces doy la vuelta y tomo ese desvío,  cada kilómetro mas o menos hay mas banderas de Marruecos y la carretera va adentrándose en el desierto, llevo combustible y una hogaza de pan, así que pienso que en el peor de los casos solo haré quilómetros y comere pan sólo. Después de unos 30 km en una vaguada de la carretera aparecen un montón de Jaimas, rebaños de camellos y pastores saharauis, lo flipo, continuó hasta que al girar veo todo otro montaje de Jaimas, camellos, camiones y 4x4, estoy flipando porque esta lleno de gente del país, ancianos, mujeres que por su vestimenta delatan que son de diferentes etnias así como los vestidos de los hombres, y cuando voy a aparcar aparece Salam, que en francés me pregunta mi nombre y de donde vengo, le cuento quien soy y me invita a aparcar, cenar y quedarme el fin de semana en el lugar que es ni más ni menos mal 0una reunión  y festival de Nomadas de todas las etnias del Sahara, Marruecos,  Argelia, Mauritania , Tunez, Mali, Burquina Faso, Senegal  y más lugares, !!Brutal!! 🤪🤪😜😜.

El resto ya lo cuentas las fotos y videos, no tengo wifi para subir fotos pero la verdad es que me da lo mismo, me encuentro muy feliz y afortunado,  hoy cenaré carne de camello y lo que me echen,  el resto ya lo iréis viendo.